"En casa cocina Charlie"...
¡Y enhorabuena! ¡Por fin un programa de cocina que cubre todas mis espectativas al respecto! En una de sus raras excepciones a la regla, "El Gourmet" no pone en escena una emisión modernosa, poco atractiva estéticamente hablando, devota de las dietas ultrasanitas estilo Cormillot o un engendro fusión incapaz de excitar el apetito de un náufrago que se pasó dos años alimentándose de raíces y agua de coco. Con Charlie Rowe, la gastronomía se enaltece , vuelve a sus fuentes, a las recetas familiares , a una justa y armoniosa combinación de sabores, a presentaciones de platos invitadores y sobre todo al verdadero gusto por cocinar, comer y agasajar amigos. Viendo este programa, quienes quieran regoderase con delicias de la buena mesa de antaño y de siempre, se van a sentir vivificados.
En un principio (como suele sucederme con "El Gourmet" desde hace un tiempo), al saber del próximo estreno de "En Casa cocina Charlie", no tuve gran fe en el programa. Imaginé se trataría de otro cocinero sofisticado, de un "bienudo" estilo Mallmann, ganador de un concurso para mí dudoso, porque no estaba al tanto de su celebración. Venía ya advertida de lo ocurrido con Matías Panizza, quien pese a haber ganado un certamen "Gourmet" (a este sí lo vimos todos por esa señal de cable ) y serle prometido como premio un programa para él solo, debió compartir cartel con Soledad Nardelli y otro muchacho cuyo nombre no recuerdo. Poco después, Matías desaparecía y la Nardelli comenzó a tener cada día más pantalla en el canal. Desde ese momento, los concursos de "El Gourmet" no me merecieron gran confianza.. Sin embargo, la pericia de Charlie Rowe tanto ante cámaras como entre ollas y sartenes, no merece sino aplausos y sea lo que sea "El Gourmet" , este nuevo cocinero de su staff agrada a quien le guste cocinar o comer, sin excepción.
Charlie Rowe es muy desenvuelto ante cámaras, pese a no contar con experiencia previa...y además cocina como los dioses. ¿Se le puede pedir algo más? Nada, teniendo en cuenta que posee un extenso y gráfico vocabulario, es didáctico y hasta se puede dar el lujo de hacer el elogio de la revista "El Gourmet.com" sin que parezca un evidente y deshonroso chivo. El hombre es un tipo fino, quien gusta de cocinar para sus familiares y amigos; uno de aquellos característicos "bon vivants" , hoy casi desaparecidos, por consiguiente, su inclusión en el staff del "Gourmet" se agradece.Por otra parte, resultan sumamente simpáticos sus diàlogos - o más bien monólogos - con la mascotita "Lucas", un troll de despirinchados cabellos violetas, a quien se llevó de amuleto cuando disputó el concurso "El Gourmet".Como si esto fuera poco, su cocina es excelente y aunque el mismo Rowe se califica de "amateur", los platos resultantes de la menos de media horita que dura su programa, están al nivel de los de un buen profesional. No son las joyas geométricas y policromas de los chefs del Hyatt o cualquier hotel cinco estrellas....¿Pero quién dijo que eso es arte culinario? Para mí, la "Haute-Cuisine" y la fusión son el efectismo de la cocina. El verdadero arte de comer y beber es lo que presentan en sus recetas Karlos Arguiñano, Doña Petrona C. de Gandulfo, Chepina Peralta, Fanny Craddock, Narda Lepes, Doña Lola Pietranera y Pedro Stramesi entre otros. Y exactamente así, cocina Charlie. No se manda platos con especias extrañas, ni fantasías tropicales, ni manjares estrellas popularizados por alguna película yanqui; lo suyo es la sencillez de los clásicos, con ese señorío de antaño tan seductor para quienes gustamos del guisito de la nona, el chicken pie - el hombre es tan criollo pese a sus orígenes escoceses y galeses, que tuvo la humildad de llamarlo "Pastel de Pollo" - o el clafoutis del campesino francés, tan rico y tan simple en esencia y en sabor.
"En Casa Cocina Charlie" es para disfrutarlo...o mejor dicho, para paladearlo. Deespués de verlo...¿A quién no le dan ganas de salir para la cocina y replicar lo mostrado en pantalla? Máxime cuando la confección de dichas exquisiteces es de lo más simple. Hasta a un burro culinario podría preparar un manjar si sigue las indicaciones de Don Rowe. Pero claro...a nosotros nos saldría rico, sin duda, aunque sin ese toque especial indefinible , propio de los verdaderos genios, aquellos que no destacan por hacer excentricidades sino por rubricar de manera excelente cuanto los demás intentamos y nos salió mal o mediocre.
No; aunque quisieramos, nuestras comidas no serían nunca tan apetitosas como las presentadas en este programa. ¿Qué nos faltaría para lograrlo? Y nuestro nuevo amigo haría un guiño entre cómplice y serio y respndería como al descuido: "...Es un secretito...de Charlie..."
Vanesa.
Hola Vanesa!
ResponderEliminarSoy una admiradora de Charlie Rowe, como no serlo...., verdad?
Te cuento: Una cocinera amateur, de España, Susana Pérez Martinez del blog "Webos Fritos" está tratando de conectarse con otros buenos cocineros amateurs de Argentina y yo pensé en Charlie..., vos podrías contactarlo, yo no sé cómo llegar a él.
Mi correo es laioicris@hotmail.com
Mi nombre es Gloria Fernandez.
Gracias desde ya!
Saludos!